¿Sociedad empoderada o domesticada?

Como las sociedades liberales siempre buscan impulsar, promover y formar, que existan ciudadanos “empoderados” y no “domesticados” por el Estado.

Hace un tiempo Gloria de la Fuente como Presidenta de Fundación Chile 21, hizo una distinción fundamental de lo que implica ser socialdemócrata, una clara vocación por la democracia y de reemplazar la focalización de las políticas sociales por derechos universales para la salud, educación y pensiones.

¿A qué niveles de derechos universales puede aspirar Chile, sin olvidar que no somos un país escandinavo? ¿Será posible una propuesta innovadora que se haga cargo de las distintas sensibilidades?

¿Será posible aspirar a una renta básica nacional? Esta renta se entregaría directamente a las personas sin intermediarios, como fue la experiencia del 10%. ¿Cuánto dinero se le podría entregar a los 6,5 millones de hogares en Chile? De acuerdo con el presupuesto del 2019, si se distribuye el 70% de los recursos asociados a los ministerios sociales, cada hogar podría recibir 340,000 mensuales aprox. y si se le entrega solo al 50% más vulnerable, se llegaría al doble por hogar. La derecha tendría el temor que se desconecte el esfuerzo individual de la recompensa por el trabajo. Sin embargo, la experiencia comparada no es concluyente, algunos estudios muestran que, al garantizar un ingreso mínimo, las personas pueden desarrollar mejor sus talentos y esfuerzo creativo. Por otro lado, la pobreza produce en general una mirada pesimista, donde las ideologías que fundan su poder en promover el odio, la lucha de clases, y la victimización capturan fácilmente a estos grupos altamente vulnerables. Desde la izquierda y una parte de la derecha también, pierden la captura del estado para administrar estos recursos, para buscar resolver “ellos” los problemas de la gente, para darles trabajo a sus seguidores y se termina en un clientelismo lamentable.

Una sociedad liberal debe busca tener ciudadanos “Empoderados” y no “Domesticados” por el Estado. ¿Hagamos un plebiscito y veamos que prefiere la población, mantener los servicios estatales deficientes o un ingreso básico universal?

Cristián Rubio Adriasola | Director ChileSuma